Reign in Blood es el tercer álbum de estudio y el debut con una compañía discográfica internacional de Slayer. Fue lanzado el 7 de octubre de 1986, y este disco significó la primera colaboración de la banda con el productor discográfico Rick Rubin, determinante en la evolución del sonido del grupo.
Reign in Blood fue muy bien recibido tanto por la crítica como por los seguidores y fue el responsable de acercar a Slayer al grueso de los seguidores del heavy metal. La revista Kerrang! describió el álbum como "el más duro de todos los tiempos", y un punto de inflexión para el thrash metal y el speed metal.
Este álbum significó la primera experiencia profesional de Rick Rubin con el heavy metal, y su perspectiva original llevó a un drástico cambio del sonido de Slayer. Rubin consiguió canciones más rápidas y ajustadas e hizo una producción de sonido limpio que contrastaba sobremanera con las grabaciones anteriores del grupo. Araya ha admitido que sus dos anteriores trabajos ni se le acercan en cuanto a la producción.
Junto a Peace Sells... but Who's Buying? de Megadeth y Master of Puppets de Metallica, Reign in Blood está entre los álbumes más exitosos de thrash metal de 1986, un año en que el género alcanzó su máxima popularidad. También ha sido citado como un influyente predecesor del death metal, junto a otros lanzamientos de thrash metal como Pleasure to Kill de Kreator, Bonded by Blood de Exodus, Darkness Descends de Dark Angel y Beneath the Remains de Sepultura.
El lanzamiento de Reign in Blood fue demorado por inquietudes con la portada y las letras de las canciones. Columbia Records, se negó a lanzar el álbum debido a las letras de las canciones y la tapa del álbum. Reign in Blood finalmente fue distribuido por Geffen Records; de todas maneras, debido a la controversia no apareció en la agenda de lanzamientos de Geffen. La canción que abre el disco, Angel of Death, referente a Josef Mengele y que describe los actos ocurridos en el campo de concentración de Auschwitz. La canción ha llevado a la banda a ser acusada de simpatizar con los nazis y de ser racistas, acusaciones que les han acompañado durante toda su carrera.
La tapa fue diseñada por Larry Carroll, que en la misma época estaba creando ilustraciones políticas para The Progressive, Village Voice y The New York Times. Cuando se terminó la portada, uno de los miembros de la banda no estaba contento con el resultado. Pero, cuando otro miembro de la banda se lo enseñó a su madre, recibiendo un "asqueroso" como definición, decidieron mantenerlo, creyendo que "tenían algo".
Slayer decidió abandonar la temática satánica de Hell Awaits y escribir sobre temas más de la calle. Las letras de Reign in Blood incluyen meditaciones sobre la muerte, la religión, la locura y los asesinos.
Tracklist:
Reign in Blood fue muy bien recibido tanto por la crítica como por los seguidores y fue el responsable de acercar a Slayer al grueso de los seguidores del heavy metal. La revista Kerrang! describió el álbum como "el más duro de todos los tiempos", y un punto de inflexión para el thrash metal y el speed metal.
Este álbum significó la primera experiencia profesional de Rick Rubin con el heavy metal, y su perspectiva original llevó a un drástico cambio del sonido de Slayer. Rubin consiguió canciones más rápidas y ajustadas e hizo una producción de sonido limpio que contrastaba sobremanera con las grabaciones anteriores del grupo. Araya ha admitido que sus dos anteriores trabajos ni se le acercan en cuanto a la producción.
Junto a Peace Sells... but Who's Buying? de Megadeth y Master of Puppets de Metallica, Reign in Blood está entre los álbumes más exitosos de thrash metal de 1986, un año en que el género alcanzó su máxima popularidad. También ha sido citado como un influyente predecesor del death metal, junto a otros lanzamientos de thrash metal como Pleasure to Kill de Kreator, Bonded by Blood de Exodus, Darkness Descends de Dark Angel y Beneath the Remains de Sepultura.
El lanzamiento de Reign in Blood fue demorado por inquietudes con la portada y las letras de las canciones. Columbia Records, se negó a lanzar el álbum debido a las letras de las canciones y la tapa del álbum. Reign in Blood finalmente fue distribuido por Geffen Records; de todas maneras, debido a la controversia no apareció en la agenda de lanzamientos de Geffen. La canción que abre el disco, Angel of Death, referente a Josef Mengele y que describe los actos ocurridos en el campo de concentración de Auschwitz. La canción ha llevado a la banda a ser acusada de simpatizar con los nazis y de ser racistas, acusaciones que les han acompañado durante toda su carrera.
La tapa fue diseñada por Larry Carroll, que en la misma época estaba creando ilustraciones políticas para The Progressive, Village Voice y The New York Times. Cuando se terminó la portada, uno de los miembros de la banda no estaba contento con el resultado. Pero, cuando otro miembro de la banda se lo enseñó a su madre, recibiendo un "asqueroso" como definición, decidieron mantenerlo, creyendo que "tenían algo".
Slayer decidió abandonar la temática satánica de Hell Awaits y escribir sobre temas más de la calle. Las letras de Reign in Blood incluyen meditaciones sobre la muerte, la religión, la locura y los asesinos.
Tracklist:
- Angel of Death (4:51)
- Piece by Piece (2:02)
- Necrophobic (1:40)
- Altar of Sacrifice (2:50)
- Jesus Saves (2:54)
- Criminally Insane (2:23)
- Reborn (2:11)
- Epidemic (2:23)
- Postmortem (3:28)
- Raining Blood (4:14)
- Aggressive Perfector (Bonus Track de la reedición de 1998) (2:30)
- Criminally Insane (Remix) (Bonus Track de la reedición de 1998) (3:17)
Banda: Slayer
País: Estados Unidos
Género: Trash Metal
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